miércoles, 11 de febrero de 2009

Tú eres mi vida

Y allí nos hallábamos ambos, bajo la luz de la luna, en aquella plaza de ensueño. Mientras observábamos la gran fuente de agua, decorada con unas luces impresionantes, y a los chorros de agua que bailaban armoniosamente mientras se elevaban hasta el cielo, para luego caer. Su cabeza estaba apoyada contra mi hombro, mientras sus cortos rizos acariciaban mi mejilla, haciendo que su aroma dulzón me recorra entero.
-Dime… si te dieran a escoger entre tu vida y la mía ¿Cuál elegirías?- la miré sorprendido, y luego sonreí.
-Pues, la mía, por supuesto.
Ella se quedó quieta por unos segundos y luego me miró con una mezcla de sorpresa y frustración.
-Claro, claro… tienes razón, tu vida vale mucho más que la mía- dijo y luego volvió a recostarse sobre mi hombro, pero se respiraba un aire incómodo. Supuse que no había captado el mensaje. Y reí, mientras ella me miraba con sus ojos marrones y profundos. Daría mi vida entera por ella, no podía creer que pensara lo contrario.
-Mi niña, mi niña preciosa…- le dije mientras le tomaba por la barbilla, obligándola a que me mire a los ojos- Tu eres mi vida. Daría todo por ti, todo ¿me oyes? Todo…

viernes, 6 de febrero de 2009

Carta a nadie


No se si me recuerdas. Nos conocimos una vez, donde la arena nos envolvió. Tú, el mar, el cielo y tus palabras de amor, tus promesas y mimos.
Me abrazaste, dijiste que me querías. Y aunque solo fue el primer momento que estuvimos juntos, lo guardé para mí. Y por meses lo recordé, susurrando las palabras a mi almohada, las palabras que tú me dedicabas.
Por siempre guardé una imagen en mi mente, la imagen de tu rostro, con el cabello rubio sobre la frente y tus ojos ceniza clavados en los míos, riendo con esa risa tan tuya, y sonriendo como aquella vez.
Y el día de la despedida, te hice una promesa: volver a verte así.
Ya hace diez veranos que no nos vemos, hace hoy que no nos vemos, ni tú, ni el mar, ni el cielo. Ya he olvidado esa imagen que con tanto amor guardé en mi mente, pero si recuerdo tu risa, tan fresca, como aquella vez.
No espero que lo recuerdes, fue hace mucho tiempo…


Tu amor de verano.

jueves, 5 de febrero de 2009

Primer amor

Nunca fui de enamorarme fácilmente, tuve algunos enamoramientos, pero eran flojos, una leve inclinación y… el amor se iba. Me dejaron estando enamorado, pero no me importaba. Por un momento creí que ya no me importaba si los amores se marchaban o no, pero tú me hiciste descubrir que estaba equivocado. Porque cuando te marchaste, mi vida se tornó de un insoportable gris, y ya nada tenía sentido. Tu me hiciste darme cuenta de que lo tuyo no fue un simple enamoramiento, que lo que vivimos fue único e intenso.
Y el hecho de que te recuerde todos los días, y de que haya derramado unas cuantas lágrimas por ti, es porque te amé demasiado.
El amor verdadero al fin existió para mí. Al menos por cierto tiempo.
Gracias por eso, gracias por hacerme creer en el amor.
Nunca te olvidaré, primer amor. Aunque ahora haya otros, nadie ni nada reemplazará el tuyo. Nadie me hará sentir lo mismo que tú lograste en mí.