martes, 26 de mayo de 2009

Jorge y Luís entraron apresuradamente por la ventana. Podían oírse unas cuantas puteadas dichas en susurros saliendo de sus bocas y abriéndose paso por la habitación. Luego de cerrar la ventana, una bala hizo añicos el vidrio justo después de Jorge se halla agachado, y la bala pasó rozándole los pelos de la nuca.
-Te siguieron, imbécil- le dijo este a Luís, que se hallaba alerta como un perro de caza.
-¿A mi? Te equivocas. Fue a ti a quien siguieron- le dijo molesto pero luego sonrió con resignación y se encogió de hombros- será mejor que te escondas.
Como única respuesta Jorge negó con la cabeza sin mirarlo, y tomó su arma.
-Deben de ser como diez, no podemos contra ellos- susurró, sin explicarse porque Jorge tomaba su arma, estaba claro que era en vano.
Este siguió sin responder nada, pero no soltó la pistola. Luís bufó con resignación, estaban cada vez mas cerca y lo único que se le ocurrió fue imitar a su compañero y sujetar su arma con fuerza.
-Si nos van a matar, al menos quiero llevarme a alguno de ellos conmigo- respondió al fin luego de un prolongado silencio. Luís no supo que decir a esto. Notó que el enemigo se hallaba cada vez más cerca de ellos.
-Hoy es mi cumpleaños- comentó. Un disparo pasó muy cerca de su cabeza, dando contra las deterioradas paredes de madera mohosa y consumida por las terminas de aquel viejo garaje. A eso le siguieron unos tres disparos mas continuos, pero ninguno dio en el blanco, y ni Jorge ni Luís, emitieron un solo sonido.
Habían ubicado su posición. Jorge apuntó con la pistola a la ventana echa añicos y Luís a la puerta del garaje, que era un pedazo de chapa.
-“Genial”- susurró su compañero, mientras el enemigo entraba imparable al viejo y mugriento garaje.
Sus últimos suspiros resonaron en el aire justo antes de la lluvia de disparos.

viernes, 10 de abril de 2009

Melodía

Entonces, la música inundó completamente la sala. Parecía imposible que solo una par de manos causaran ese efecto sobre las teclas del piano, causando el eco de una emoción extraordinaria.
La música comenzó algo lenta, con tintes dulces y rápidos.
Luego empezó a ser más alegre, más rápida, llena de felicidad, de sensaciones. Extremadamente dulce, bella, magnífica. Pero siempre suave y delicada.
Me inundó por completo y por un momento, no quise salir. Dejé que me invadiera, que ocupara cada fibra de mi cuerpo. Formé parte de ella, la sentí, interpreté.
Sonreí, con los ojos cerrados, intentando imaginarme una historia para esta música tan maravillosa e irreal.
Pero luego, hubo una pausa y comenzó a ser mas tranquila, como al principio, lenta, pero siempre dulce. Era simplemente perfecta la forma en la que había empezado, cualquier cambio estaría mal. La canción se encaminó a la realización, más lento y más bajo. Terminando con una nota solemne, como los arcos resonantes de una catedral llena de velas.
Al abrir los ojos, me di cuenta de que se habían humedecido, estaba llorando.
Te levantaste, quitaste las manos de las teclas marfil y me abrazaste. Y, luego, dulcemente, limpiaste mis lágrimas. Yo no dije nada, supuse que la fascinación de mi rostro era suficiente.
Lentamente, acercaste tu rostro al mío, y sentí un escalofrío de lo más delicioso cuando tu dulce aliento rozó mi piel, mientras susurrabas bajito a mi oído.
-Tú la inspiraste.

viernes, 6 de marzo de 2009

Hoy llegué a mi casa con la sensación de que nunca jamás estaría solo, y eso es porque se que siempre estarás conmigo. Encontrar a alguien como tú, es un posibilidad tan minúscula como la de atrapar un rayo, y seguro alguna vez pensaste que nunca encontrarás a ese alguien, yo también. Pero aquí estoy, y aquí estas.
Siento que ahora estoy más fuerte para poder seguir el camino y eso porque tu corazón camina conmigo.
Ya nadie podrá separarnos, porque mi corazón ira a donde quiera que estés. Estemos juntos o no, esto seguirá, y a cada paso que demos juntos, nuestra relación crecerá.
Adoro todo de ti, adoro tus besos, tus caricias, tus palabras de amor, y esa chispa que surge en tus ojos cada vez que me miras.
Gracias por amarme, gracias por dejarme amarte.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Tú eres mi vida

Y allí nos hallábamos ambos, bajo la luz de la luna, en aquella plaza de ensueño. Mientras observábamos la gran fuente de agua, decorada con unas luces impresionantes, y a los chorros de agua que bailaban armoniosamente mientras se elevaban hasta el cielo, para luego caer. Su cabeza estaba apoyada contra mi hombro, mientras sus cortos rizos acariciaban mi mejilla, haciendo que su aroma dulzón me recorra entero.
-Dime… si te dieran a escoger entre tu vida y la mía ¿Cuál elegirías?- la miré sorprendido, y luego sonreí.
-Pues, la mía, por supuesto.
Ella se quedó quieta por unos segundos y luego me miró con una mezcla de sorpresa y frustración.
-Claro, claro… tienes razón, tu vida vale mucho más que la mía- dijo y luego volvió a recostarse sobre mi hombro, pero se respiraba un aire incómodo. Supuse que no había captado el mensaje. Y reí, mientras ella me miraba con sus ojos marrones y profundos. Daría mi vida entera por ella, no podía creer que pensara lo contrario.
-Mi niña, mi niña preciosa…- le dije mientras le tomaba por la barbilla, obligándola a que me mire a los ojos- Tu eres mi vida. Daría todo por ti, todo ¿me oyes? Todo…

viernes, 6 de febrero de 2009

Carta a nadie


No se si me recuerdas. Nos conocimos una vez, donde la arena nos envolvió. Tú, el mar, el cielo y tus palabras de amor, tus promesas y mimos.
Me abrazaste, dijiste que me querías. Y aunque solo fue el primer momento que estuvimos juntos, lo guardé para mí. Y por meses lo recordé, susurrando las palabras a mi almohada, las palabras que tú me dedicabas.
Por siempre guardé una imagen en mi mente, la imagen de tu rostro, con el cabello rubio sobre la frente y tus ojos ceniza clavados en los míos, riendo con esa risa tan tuya, y sonriendo como aquella vez.
Y el día de la despedida, te hice una promesa: volver a verte así.
Ya hace diez veranos que no nos vemos, hace hoy que no nos vemos, ni tú, ni el mar, ni el cielo. Ya he olvidado esa imagen que con tanto amor guardé en mi mente, pero si recuerdo tu risa, tan fresca, como aquella vez.
No espero que lo recuerdes, fue hace mucho tiempo…


Tu amor de verano.

jueves, 5 de febrero de 2009

Primer amor

Nunca fui de enamorarme fácilmente, tuve algunos enamoramientos, pero eran flojos, una leve inclinación y… el amor se iba. Me dejaron estando enamorado, pero no me importaba. Por un momento creí que ya no me importaba si los amores se marchaban o no, pero tú me hiciste descubrir que estaba equivocado. Porque cuando te marchaste, mi vida se tornó de un insoportable gris, y ya nada tenía sentido. Tu me hiciste darme cuenta de que lo tuyo no fue un simple enamoramiento, que lo que vivimos fue único e intenso.
Y el hecho de que te recuerde todos los días, y de que haya derramado unas cuantas lágrimas por ti, es porque te amé demasiado.
El amor verdadero al fin existió para mí. Al menos por cierto tiempo.
Gracias por eso, gracias por hacerme creer en el amor.
Nunca te olvidaré, primer amor. Aunque ahora haya otros, nadie ni nada reemplazará el tuyo. Nadie me hará sentir lo mismo que tú lograste en mí.